ANTONIO M
IRANDA

selección de poemas de 'PERVERSOS'
Tener miedo de nuestra fantasía
miedo de que no sea verdad
el amor que se está practicando
miedo de ser apenas poesía
de encubrir apenas la maldad
de estar solo y apenas soñando.

FOTO
OXI
DADA

(…)

Aquel niño de la foto
no existe más
existo yo
para contradecirlo.


PER
VER
SOS

IV


Ojo por ojo, bala con bala
diente por diente.
Versos clandestinos, traficantes
en vez de amantes, ráfagas
decantadas en noches de desabrigo
desencantados de cualquier inocencia
pidiendo limosna entre los autos
en la señal cerrada
con un ojo perforado como el Poeta
descalzo en la arena incandescente.
Criaturas estupradas, mujeres
transformadas en jabón en polvo
en cosméticos, en pan de horno
señores en la cola del banco
tarjeta magnética en mano
descontando beca escuela
vale todo, hambre cero
en el happy-hour, en el anuncio de Tevé.
Ventanas blindadas, abrazos
furtivos, sueños hurtados, DNA
a crédito o el mes acabando
antes del sueldo.
Si igual estamos fritos
Fe ciega, hacha afilada.


VIII


La única Constitución que yo
conozco
sigo, venero, persevero
es de la Escuela de Samba
en que la portabandera
era la Hilda Huracán
Y creo en la Virgen María que era de Virgo
en las garantías constitucionales
en las salvaguardas, en las resalvas
en las entrelíneas del contrato social.
¡Aparta de mi este cáliz!
Cállese para siempre
si no puede dar testimonio
si el miedo transfigura su fe ciudadana
malsana.
Cuando el privilegio
cuando el sortilegio
cuando no haya más espacio
cuando la contaminación
cuando la corrupción
cuando los impuestos lo lleven a la inanición
cuando
entonces levántese del hoyo en que siempre
estuvo
entonces tire la primera piedra
reclame sus derechos
exija la devolución de las Siete Caídas
de Iguazú
pida la canonización de
Antônio Consejero
la prisión perpetua para aquel
ex-Presidente
aquel, el mismo
que robó nuestro sueño
la creencia en la democracia
y compró un apartamento en Miami.

X


Si tiene vagina es mujer
si tiene falo
veamos
si tiene seguro de vida
si tiene la oración del rosario nobiliario
de simientes, corazón
verso ardiente
Si tiene vergüenza en la cara
convicción
si todavía
si
Ahí no hay remedio
confiscan nuestros ahorros
nuestra esperanza
cobran los impuestos y crean
la eutanasia para los jubilados
para salvar la debacle del Seguro Social.
Porque hoy es Sábado
Porque Dios es brasileño.

XIII


Puedes soñar con la lotería
puedes valerte del amuleto
figa-de-guiné, juras amor eterno
pero resistes
e insistes.
Puedes llegar a ser feliz.
Puedes ser médico, cuenta en el banco
nombre en la plaza
tú que eres chulo, haz disimulo
puedes ser pastor, político
vendedor de electrodomésticos
catador de papel
todo puedes y nada puedes.
Quien puede, puede.
Quien no puede, se remueve.
Tú que crees en los santos padres
en los podridos poderes
que crees en los políticos
en las sagradas escrituras
en las bulas papales
que das crédito
Está bien.


XIV



El político es un fingidor
que de veras siente
lo que está fingiendo
un prestidigitador
en su mandato es un semidiós.
Políticos, los hay de todos los tipos:
altos, mezquinos, pequeñitos
sobre tacos altos
llenos de dedos o sin dedos
sinceros en sus remedos
letrados y analfabetos se emparejan
firmando decretos ley
promisorias, pregatorias
mientras hacen gárgaras
en el espejo.
Y nosotros, a los pies de la santa imagen
loamos al Señor
nosotros desterrados hijos de Eva
hijos de la patria amada
idolatrada.

XVI

Epitafio del Presidente


Vivió entre canallas
y era uno de ellos
En la Presidencia
era no más que el Secretario
Hizo discursos memorables
porque eran horribles
Tenía teorías sobre teorías
pero nunca pontificó
Cuanto más erraba
más perseveraba en la convicción
Dejó versos imperecederos
que no llegó a escribir
Era un pesado
de lo que siempre se jactaba
El moría
mientras vivía
para algazara
de los más próximos
que le contaban
los días
Luego lo tendremos de vuelta
en una reencarnación
Allá es que no se va a quedar.

XXI

Parafraseando a Mario de Andrade

Odio los temperamentos regulares.
M.de A.


Que el cielo caiga
y las iras súbitas, insanas
maculen tu tranquilidad
¡oh! feliz idiota de turno.
Tú, burgués apacentado y calmo
en el sofá de la sala, letárgico
- asno convicto, premiado
escribes discursos
mientras el ministro fornica
bajo el estandarte
en que se esconde.
¡Come! ¡Cómete a ti mismo, oh gelatina pasmada!
¡Oh! ¡puré de patatas morales!

Nosotros, mortales
vestales lujuriantes
en este festín macabro
osculando glúteos adiposos
de rodillas, veneramos tu prepotencia.
Verme, abyecto
chancro, sanguijuela con derechos
sempiternos
electo y reelecto
constitucionalísimamente
proclamado
y diplomado diputado,
presidente del Senado
de la Comisión de Constitución y
Justicia
sentado en el Supremo Tribunal
labrando sentencias
distribuyendo dividendos en el Banco Central
prebendas, ventajas
mierda centrífuga
cambiando de lado, de partido
dividiendo y luego sumando
ecuacionando
subvirtiendo
¡Oh! Leviatán de los siete mares – ¡qué apetito voraz!
Dueño de la Midia, comensal insaciable
como Cronos, engulle tu propio rabo
y muere de hepatitis.


XXIV

Consejo


No tome en serio a los hombres serios.
No tome en serio a la poesía
los sermones del profeta
que proyecta futuros
y defeca sueños
juramentos de amor
el secreto es ser leve
desvestirse de credulidades
y supersticiones
autoflagelaciones.
Cosas así:
el amor redime u oprime, el perdón
es mejor para quien perdona
nada como un día después de otro
- para quien sobrevive al otro día.
No crea en quien cree
no ponga las manos en el fuego
por quien quiera que quiera
ni jure por el amor a Dios.

REV
VER
SOS


J

Hermétrica


El cuerpo tiene sus decires
-superiores e inferiores-
y tiene también sus humores
porque el cuerpo como la brasa
crepita en medio de la noche
ardiendo sus entrañas
es independiente e indiferente
a nuestro comando
porque habla pero es sordo
porque el cuerpo densifica
sus sabores imprecisos
que luego se explicitan
cuando se rebela y huele
y está siempre despierto
cuando estamos dormidos.


M

Soneto a la subversión


Adolescente subvirtiendo el sentido
de la piedra en que reposa el cuerpo,
antenado con el mundo, en la playa,
como pila de voltaje inaudito.
En su juventud es cosa, es fruto,
adjetivo, y piensa por anagramas
de verano. Después violenta el mar
con su volumen de recios tejidos.
Siempre en grupo, como en revolada,
curtido, soñando, exhibido, surfeando:
sólo para probar que la rima existe.
Rumia sobre los actos practicados,
gasta el tiempo como un pasatiempo
y dicen que hace sexo con retórica.

Las ilustraciones son de José Campos Biscardi para las ediciones en portugués y en español.

Antonio Miranda
Brasil
www.antoniomiranda.com.br

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