Zona Moebius - Música: October Project

Fernando Acevedo

En otro artículo platicaba sobre artistas o grupos musicales cuyo sonido es inigualable. Con ello quiero decir que prácticamente nadie suena como ellos. Éste es el caso del grupo October Project, cuyo primer disco, homónimo, salió a la venta en 1993.

Vamos por partes: ¿a qué "suena" October Project?

Luchando con todas mis fuerzas para no parecer poeta, lo más que puedo lograr es decir que suena a melancolía. ¿Será el fantasmita en sepia de la portada del disco, así como todas las evocadoras fotografías del interior del booklet? Puede ser, aunque mucho es también mérito de la extraordinaria voz de la cantante principal, Mary Fahl, cuyo especial registro semibajo, andrógino podría decir, hace de cada canción una lluvia de verano, un atardecer, el viento, la noche.

También algo tienen que ver, cómo no, las letras de todas las canciones del disco. Siendo básicamente baladas, no entran definitivamente en el saco de lo inspirado en lo sencillo o lo banal en el que se empeñan en meter al género ciertos músicos, compositores y cantantes de los cuales seguramente nunca hablaremos aquí. Por ejemplo, leí por allí que la letra de la canción Take me as I am (Tómame tal como soy / alguien a quien no conoces / aún en la oscuridad / podrías no estar seguro) se basó en la novela Interview with the vampire. El arte de crear un texto musical no sale únicamente del normal amor vivido sino también del ruego de un no muerto.

Otro elemento importante en el sonido de October Project es, por supuesto, la música. De manufactura delicada, sin embargo en cada pieza del disco ésta convive muy bien con momentos de catarsis, con crescendo épicos de rock que retumban y se anidan en la caja torácica, que anudan la garganta, que humedecen los ojos. Basta escuchar, por ejemplo, Be my hero para comprobarlo.

Algo tiene que decir también la armonía de los elementos maravillosamente intercalados por el tecladista Emil Adler. ¿Y los coros? Sí, sí hay coros. Estupendos coros que se enlazan alrededor del tronco musical sin ahogarlo.

El resultado de la ecuación es un disco de altísima calidad: inimitable, añorable, deseable, envidiable.

October Project sigue vendiendo. A pesar de haber dejado la casa musical Epic en 1997, al menos 300.000 copias de su October Project han sido compradas (lo que, desde el año de su salida, significa 30.000 copias al año). En el sitio oficial se menciona que Billboard ha calificado al álbum como "caviar para paladares refinados".

Tres breves años de carrera comercial han producido únicamente dos álbumes completos (el segundo, Falling farther in), aunque su discografía cuenta también con algunas participaciones en trabajos colectivos o en bandas sonoras para películas, así como con tres discos sencillos. Como un fantasma hermosamente benévolo, los pasos del grupo se siguen escuchando pues existe ya un nuevo proyecto, November Project, que estará formado por tres integrantes originales de la banda: los esposos Emil Adler y Julie Flanders, y la tecladista y cantante Marina Belica. Mientras llega, la recomendación es no quedarse sin una copia de October Project. Estoy seguro que les gustará.

October Project, de October Project
Epic Records, EK 53947, 1993

October Project, en este álbum, es Mary Fahl (voz), Marina Belica (voces y teclados), David Sabatino (voces y guitarras), Emil Adler (voces y teclados) y Julie Flanders (letras). Como músicos adicionales participan Urbano Sánchez (percusiones), Michael Rhodes (bajo) y Chad Cromwell (batería), así como otros músicos de orquesta cuyo número varía dependiendo de las canciones del álbum.